01 Feb Preparación al parto ¿cómo reducir la probabilidad de la episiotomía?
Posted at 20:20h
in Embarazo
Hola a tod@s de nuevo:
Una vez más me pongo a vuestra disposición para poneros al corriente de mis investigaciones durante la experiencia que está siendo mi embarazo. Actualmente me encuentro en el 8º mes de emabrazo y empieza a preocuparme cada vez más el llevar a cabo un buen parto y un buena recuperación del mismo.
Durante este artículo os quiero hablar fundamentalmente de aspectos relacionados con la episiotomía, trabajo de prevención de la misma y consejos para evitarla.
El Periné:
El periné es un conjunto de musculos que se encuentran en la base del tronco de hombre y mujeres, básicamente se sujetan en los huesos de la cadera y sus funciones van desde el control de apertura y cierre se los esfínteres hasta la sujeción de las vísceras del bajo vientre.
En la mujer el perineo pasa por delante, donde está la vulva y por detrás, bordeando el ano, todos separados por un puente cutáneo. En él se encuentra la zona fibrosa que constituye un elemento de soporte esencial de los órganos genitales internos… La destrucción de esta zona propicia el desplazamiento de los órganos (lo que se conoce como prolapso).
Por diferentes circunstancias no es raro que el perineo se rasgue durante el parto.
Ante una situación del peligro del bienestar del bebe durante el parto u otras complicaciones que se puedan dar, en algunos casos (30%), durante el parto se efectúa un corte quirúrgico en el perineo (episiotomía), para prevenir un mal desgarro (no siempre efectivo) , acelerar el parto, etc.
Los músculos y las aponeurosis del perineo femenino tienen la misma disposición general que el perineo masculino. Las principales diferencias se deben a la separación del aparato genital (vagina) del urinario (uretra) al momento de traspasar la región perineal anterior (diafragma urogenital).
Lo primordial es tomar conciencia de la ubicación exacta del periné y luego comenzar a trabajarlo para aprender a relajarlo previamente al parto y para fortalecerlo para prevenir molestias post parto.
* Imagen explicativa:
Bueno, ahora que ya sabemos un poquito más sobre el perineo, vayamos al kit de la cuestión, la episiotomía. Veamos qué es exactamente:
La Episiotomía:
VIDEO:http://m.youtube.com/watch?v=WGuf5ELCXzE#
Seguramente a más de una mujer embarazada (como a mí) le han hablado de lo que es una episiotomía y nos hemos muerto de miedo…grrrrr!
Para las que no lo sepa todavía, una episiotomía viene a ser un corte quirúrgico que se realiza justo en la culminación del parto del bebé (para acelerar el periodo del expulsivo), este corte se realiza en el área de la musculatura más fibrosa del periné (músculo que sujeta las vísceras, también conocido como suelo pélvico), está entre la vagina y el ano, para ampliar la apertura vaginal y que de ese modo el bebé nazca en menos tiempo y con mayor facilidad (por algún motivo de urgencia)
Los ginecólogos solían realizar episiotomías rutinariamente también para evitar desgarros en la vagina, particularmente durante el primer parto vaginal de la mamá pero con el paso del tiempo se ha comprobado que no tenía porque ser así… No siempre es necesario.
Eran muchos los expertos que creían que la incisión «limpia» de una episiotomía sanaba más fácilmente que un desgarro espontáneo. Sin embargo, una gran cantidad de estudios realizados en los últimos 20 años han refutado esta teoría, y la explicación es muy sencilla (según tengo entendido):
-«Cuando un músculo se desgarra o rompe siempre lo hace por aquellas fibras que son más débiles de tal modo que las fibras más sanas, duras y resistentes no se rompen, ¿eso que supone?
Por lógica aplastante si el desgarro es natural salvamos aquellas fibras musculares más sanas (que una episiotomía cortaría) y por tanto la cicatrización de las fibras desgarradas se ayudarían del sostén que le aportan las fibras sanas y su reconstrucción/ recuperación/ cicatrización sería más rápida.
Es por eso que ahora la mayoría de los expertos están de acuerdo en que este procedimiento no debería llevarse a cabo rutinariamente y deberían dar más tiempo a la futura mamá para que sus fibras musculares cedan (gracias a las hormonas que propias del parto que aportan flexibilidad natural a estos tejidos) por supuesto siempre y cuando el bebé que nace se encuentre en perfectas condicio es y no sufra peligro alguno.
Las investigaciones han demostrado también que las mujeres que sufren desgarros espontáneos generalmente (cada caso es particular) se recuperan en la misma cantidad de tiempo o incluso en menos tiempo y, a menudo, con menos complicaciones que aquellas a las que se les realizan episiotomías.
Las mujeres a las que se les practica una episiotomía tienden a perder más sangre en el parto, tienen más dolores durante la recuperación y tienen que esperar más tiempo para tener relaciones sexuales sin molestias… conclusión… Si se puede y no hay pelogro… ¡No me corte Doctor! Deme tiempo:)
Además, las mujeres a las que se les practica una episiotomía tienen más posibilidades de sufrir desgarros graves en la zona del esfínter anal o, incluso, en el recto (conocidos como laceraciones de tercer o cuarto grado respectivamente) que aquellas que dan a luz sin que las corten (como quien da un corte a una tela y tira… Y esta se desgarra más aún).
Estos desgarros graves tienen como consecuencia más dolor perineal después del nacimiento, requieren un período de cuidados delicados para su recuperación y es significativamente más largo y tienen más posibilidades de afectar la fortaleza de los músculos del suelo de la pelvis.
Además, los desgarros del esfínter anal aumentan el riesgo de incontinencia anal (es decir, los problemas para controlar el movimiento de los intestinos o lo que es peor los gases).